8ª JORNADA

Calima no, cuarenta grados tampoco, boira (como dicen los catalanes). La octava jornada se disputó en un invernadero. Los jugadores no bebían, aspiraban. El agua se evaporaba al coger la botella con la mano. Increíble lo vivido ayer, y no sólo en cuanto a lo climatológico.

Ya suena manido hablar del nivel de pádel, de los puntos espectaculares... Pero es cierto, como espectáculo, lo propio es superarse y eso es lo que a nivel general se está viendo desde que comenzáramos el lunes pasado.

Empezó el día con el debut de la joven promesa Edu (Eduardo Herrero jr.) que sustituye para el resto del torneo al lesionado Juan Carlos (recupérate pronto, compañero!). Y lo hizo como pareja de Antonio, representando al equipo C, para enfrentarse a la pareja Óscar/Raúl (equipo B).

Después de una fase de tanteo en la que no se decidían claramente los puntos por ninguno de los jugadores, los "ces" fueron sumando juegos a su favor merced a una pronta adaptación a las extremas condiciones que obligaban a hidratarse a cada momento. El primer set finalizaría con 6-2, igual que el segundo, en el que siendo ya mucho más disputado, los "bes" pusieron en más de un aprieto a sus rivales, rompiéndoles el servicio en una ocasión.

En líneas generales, cabe destacar la progresión de Raúl que, en sus propias palabras, es otro comparado con su debut hace una semana. Es lo que tiene la continuidad del juego y la alta exigencia de  compañeros y rivales. Esto obliga a tirar de responsabilidad por no desentonar y se traduce en una notabilísima mejoría en el juego personal. Lo mismo puede decirse de Óscar, que ha pasado de jugar con sus compis para echar el rato a encontrarse con la tensión y expectativa que genera la competición, aunque sea de corte social (menos competitividad, más deporte para todos). 

En el equipo C, Antonio en su línea de mejora, con una capacidad técnica que va camino de situarse a la altura de su capacidad física. Sólo resta que la organización le libere algo de la presión a la que le somete el horario para poder dedicárselo a ese otro papel crucial en su vida: todo un padrazo! Y como ya se ha comentado, el joven Edu se incorpora al equipo tras su gira italiana (erasmusiana) dándolo todo por doquier. Aún cabe esperar mucha evolución en su juego, pero su dedicación y compromiso le llevará a los éxitos que se merece él y su equipo.

Pero para darlo todo ya estaban el presidente de esta nuestra comunidad y el maestro facebookanero. Mientras los deportistas de verdad se batían el cobre a paletazo prieto, los susodichos cargos se batían por ver quién cogía el mejor sitio y la mejor postura para giving it all. Ahorramos fuerzas para comentar tan.... imagen.

La jornada continuó con un salto al pasado. Si recordáis, habíamos dejado interrumpido el último partido de la jornada dominical por falta de luz artificial. Se medían Alfonso/Óscar (equipo B) y Cristóbal/Javier (equipo D). El primer set se había decantado para los primeros (6-2) y el partido se paró en el tie break que resolvía el segundo set con un resultado parcial de 4-2 para los "des". 
Reanudado tras un breve calentamiento, éstos igualaban la contienda por lo que sólo quedaba desempatar. En una apuradísima muerte súbita, Alfonso y Óscar acabaron por doblegar a sus correosos adversarios y sumar así dos nuevos puntos para su equipo.

Sin tiempo para que la pista respirara, saltaron a continuación Álvaro y Cristóbal (ligero doblete pues acababa de finalizar el partido del domingo) por el equipo D para medirse con Juanjo y Santi (equipo E).
Partido emocionante donde los haya, manteniendo ambas parejas sus saques respectivos férreamente hasta que (siempre ocurre igual cuando pasa lo mismo) llegaron al tie break. A pleno calor y pulmón, con las fuerzas cada vez más justas pero con la ilusión intacta, la contienda se extendió al límite, ganando finalmente el juego decisivo, y por tanto el primer set, los "des".
La segunda manga, sin embargo, no fue tan apurada y Juanjo con sus mates desde la línea de saque trayéndose la bola y Santi llegando hasta el último grano de arena que hubiera en la cancha, se impusieron por un cómodo 6-2 sin dar apenas opciones a un Cristóbal que cada vez que sudaba se asustaba y un Álvaro que era conocedor de la necesidad de reservar fuerzas para su partido siguiente... ¡que la organización le había colocado (aviesamente) a continuación!
Así las cosas, sólo quedaba dilucidar el encuentro con otra muerta súbita (y ya van más de quince!). Pero vaya muerte más luchada!!! Punto a punto, invadiéndose mutuamente los espacios, los cabezas de cartel iban a todo; como si no existieran los compañeros. Y sucedió lo que tenía que pasar: en una invasión de Juanjo al campo de su compi Santi, dejó desguarnecido su sitio y hábilmente Álvaro se la metió... doblada (queremos decir, con doble bote a Bote).

Como suele ocurrir entre partidos, los niños toman las palas, las pelotas y la pista. Se lían a jugar y jugar hasta que los mayores, tan inoportunos como en casa, les echan para... jugar ellos (qué abusones). Pero mirad por dónde, en esta ocasión y antes de empezar el último partido de la jornada, aparecieron dos niños ya creciditos. Bueno, uno bien grandullón (ya no cumple cuarenta) y una que ya no cumple treinta. 
Ambos querían comprobar su estado de forma tras seguir sus respectivas fases de recuperación física en las mejores clínicas (Puerto de Santa María y Moguer) y con los mejores recuperadores del momento (por respeto a la intimidad no estamos autorizados a desvelar sus nombres).
Gentilmente, accedieron a un posado con desigual fortuna (lo sentimos, Albertito).



Como anticipábamos, la jornada se cerraba con un esperado duelo entre los cabezas de los equipos C (Eduardo/Rubén) y D (Miguel Ángel/Álvaro).
Puro sofoco, noche cerrándose según avanzaba el calentamiento, numeroso público en la zona vip (butacas en el otrora verde y envidiado césped de Divalia) y primera presencia de las coachs particulares de los "unos" (Cartes y Proy).
Sorpresivamente, el equipo D planteó estratégicamente el encuentro disponiendo en el revés a su jugador nº 2, dejando de manifiesto la increíble igualdad entre éste y su compañero (nº 1). A este respecto cada vez llegan más comentarios a la organización sobre tan polémica decisión. Pero bueno, pelillos a la mar y al grano grano, lo cierto es que desde el primer momento dio resultado tan estudiada estrategia.
Apenas transcurridos veinticinco minutos, los "des" ya lideraban el marcador con un contundente 4-1. Pero no tardaría en llegar la reacción de sus rivales y a punto estuvieron de igualar el tanteo al ganar dos juegos seguidos. Se llegó así al 4-3 y saque para los "ces" con la posibilidad del empate al alcance pero... no sólo no empataron sino que dejaron inmóvil su casillero hasta finalizar el set con un 3-6 en contra. Mikel y Álvaro habían ganado el primer envite.
El comienzo del segundo se antojaba a la concurrencia como una posible vuelta a la tortilla, y así lo manifestaban con sus constantes ánimos (ya se sabe, el público siempre con el débil y deseoso de ver más espectáculo). Y en principio así se barruntaba porque los "ces" con un inmenso "abueluco" dándolo todo y un Rubén haciendo honor a su sexto puesto en el actual rankin divalés se pusieron con un prometedor 3-1 para sus intereses. Pero la máquina D, porque no tiene otro nombre este equipo (y eso que la organización sospechosamente obligaba a la mitad de esa máquina a hacer doblete continuo, ¡la desfachatez no tiene límites!) se anotó cinco de los seis juegos siguientes para desconsuelo de la peña D que poblaba su palco.
En definitiva, la máquina de devolver pelotas (cansinos son, oye) se impuso a la peña por 6-3 y 6-4. No obstante, hay que dar la enhorabuena a cuatro jugadores que cuando acabaron el partido eran puro y ardiente... sudor.

Así se cerraría una calurosísima jornada que, si nadie lo remedia, es sólo una más de las que nos quean!!!