6ª JORNADA

El torneo llegaba a su ecuador con la jornada de hoy sábado. Con dos partidos por delante, y a pleno sol veraniego, cuando más canta la calandria y aprieta el ruiseñor... ahí estaban a las diez de la mañana cuatro valientes, que a toro pasado, mejor sería calificar de temerarios padelistas; y qué vamos a decir de los que les seguirían. Baste señalar que de los cuatro siguientes, los que jugarían a las once y media, dos hacían doblete. Vamos, pabersematao... deltó! (gracias por la expresión, inefable Rafa; giving it all).

Pues eso, vibrante primer set del primer partido. ¡Sólo duró 50 minutos! Que no está mal para empezar la jornada. Tras un 5-3 en contra, el equipo E (Juanjo/David) iguala para perder el saque que la hubiera dado la primera manga. en un interminable juego en el que parecía que ninguno de los cuatro jugadores quería cerrar la calurosa agonía, se llega al tie break. Este juego decisivo lo suma a su casillero el equipo A (Augusto/Juanfran) después de dos estratosféricos puntos (dignos de los galácticos pro-toureños).

La extenuación asoma y el comienzo del segundo set se demora diez minutos para darle tiempo a Augusto para que, con su reconocida habilidad y deportividad, le pusiera el puño a la pala de Juanjo. Lástima de no haber tardado un minuto más porque se hubiera batido un doble récord guiness: más tiempo en poner un puño; puño pero puesto (hay opiniones encontradas sobre si el recordman hubiera sido Augusto o el abueluco que, para variar, dio muestras de su holganza metiéndose en tos los saraos que huele.

Se retoma el partido con un previsible largo set; en efecto. Aunque el resultado (6-3) `parezca lo contrario, la igualdad en cada equipo y la sucesión de puntos de rotura entre ambas parejas hizo que se extendiera el suplicio a cuarenta y cinco mintuos.

Extraordinaria mejoría en el juego de Juanfran que, con su envergadura a favor, sacó cuatro bolas (Juanfran, nos debes dos) de las pista antes de irse de finde a su querida Granada.

En la pareja E destacó en su debut Juanjo (the relax man); David, que hasta este encuentro permanecía invicto, encajó su primera derrota, coincidiendo con un ligero bajón en su estilista juego.

Es normal que en una jornada de fin de semana se produzcan situaciones excepcionales. Así fue como tuvimos que consolar a Augusto al despedirse de sus suegros, esposa e hijo, que emprendieron su marcha a la playa. Así es de sacrificada esta profesión de esposo, queremos decir de padelero. He aquí un testimonio gráfico, una vez que nuestro crack se sobrepuso de la llantina.

Después de media hora de recuperación, con spa incluido, los números one de los equipos A y E, Augusto y Juanjo respectivly,  reemprendieron la jornada, esta vez acompañados cada uno por los números two, Pepe y Santi.

Apretadísimo encuentro que hubo de decidirse por la muerta súbita, antes de que la muerte fuera segura para los repetidores (nunca se sabe si se repite porque no se sabe o porque gusta).

Según no nos informan desde la secretaría de la organización, a la que se encomendó en balde que estuviera al liquindoi del desarrollo del match, hemos de suponer que tras el 6-3 para los "aes" y el 6-4 para los "es", ese tie break tuvo que ser agónico.

Y así fue, según los datos que hemos recogido de los propios jugadores mientras los encargados de retransmitir el evento estaban más preocupados por recuperar el tiempo perdido durante la semana que de cumplir con lo recogido en el convenio del evento (pero eso será materia de una próxima entrada si persiste la actitud).

Un juego decisivo disputado a más de 107º F, con cristales como radiadores, lágrimas disfrazadas de sudores, llantos disimulados, y después de 17 minutos, la bola se decanta en una doble pared a favor del equipo E, que suma y sigue para colocarse de líder destacado en la clasificación  por equipos.

A pesar de la peassso caló, bajo la sombra pudieron seguir buenos golpes y mejores lamentaciones parte del numeroso público que se congregaba en las instalaciones de Divalia Coast.

Finalizando la 6ª jornada, como preludio del esperado triunfo de nuestra selección ante los gabachos y en conmemoración de la llegada al ecuador del torneo, se estimó conveniente que los jugadores y fans más incondicionales (unos más que otras y viceversa) limaran asperezas bajo una siempre agradecida sombrita y más celebrada cruzcampo. Qué maravilla! Qué fría! Ole por Irina!!

Hasta aquí la primera parte de la competición. 

Queda la segunda y decisiva. Esperemos que se desarrolle por los mismos cauces deportivos y sociales que hasta ahora. Al final, lo que interesa es disfrutar.